La secuela de Misterio a bordo es una comedia que relata una nueva aventura de Nick y Audrey Spitz como detectives profesionales que intentan resolver un crimen con más pasión que experiencia.
En la primera película, Nick (Adam Sandler) y Audrey (Jennifer Aniston) Spitz son un matrimonio que viaja a Europa por su aniversario. En el avión, conocen a un hombre misterioso que los invita al barco de su multimillonario tío. Nick y Audrey aceptan y como consecuencia se ven atrapados en una serie de crímenes que culmina con ellos, casi accidentalmente, atrapando al culpable.
En esta secuela, nos enteramos que, luego de esa aventura, Nick y Audrey dejan sus trabajos (él era policía y ella peluquera) y forman una agencia de detectives privados. En medio de una mala racha, aparece Vikram, el Maharajah que habían conocido abordo del barco en la primera película, y los invita a su boda que se llevaría a cabo en una isla privada. Estas supuestas vacaciones salen mal, ya que en medio de las celebraciones, Vikram es secuestrado y uno de sus empleados aparece muerto. Nick y Audrey no lo dudan y entran en acción.
Con un nuevo grupo de posibles sospechosos, incluidos el Coronel (personaje que regresa), la futura esposa de Vikram, la hermana de Vikram, la exnovia de Vikram y su compañera, un amigo y ellos mismos, Nick y Audrey se embarcan en una serie de aventuras para descubrir al culpable. Por supuesto, con su limitada experiencia, hacen lo mejor que pueden y muchas veces generan más problemas de los que debían resolver para empezar.
¿Quién no vio los afiches promocionando la película que decían: “Primero visitan una isla. Segundo, Francia”? Exactamente así sucede: luego del secuestro del Maharajah, Nick y Audrey viajan a Francia donde se encuentran con los secuestradores, participan de persecuciones y culminan su aventura con un gran final sobre la Torre Eiffel.
La película dura una hora y media, un gran retorno a las comedias de 90 minutos que le dieron a Sandler sus comienzos. Y como muchas de sus películas, esta también cuenta con un elenco de estrellas, que incluye a Mark Strong, Adeel Akhtar, Mélanie Laurent, Jodie Turner-Smith, Enrique Arce, entre nuestros protagonistas.
Además, podemos sentirnos identificados tanto con las expresiones como con las reacciones de los personajes. El diálogo es tan real que aunque parezca fuera de lugar por momentos, nos encontramos diciendo “sí, yo hubiera hecho lo mismo”. Y por supuesto, está llena de clichés de policiales, buenos y malos, incluidos a propósito para lograr ese humor tan particular de las películas de Adam Sandler.
En resumen, Misterio a la vista es la secuela de una comedia de crímenes que, mientras se mantiene fiel a la película original, tiene suficientes elementos nuevos para volverla entretenida e inesperada. Sobre todo, ¡una gran película pochoclera!
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Sobre Mijal Cannizzaro Azubel
Es un buen día si termina con un ratito para ver una película o un capítulo de alguna serie.🍿🤩
