El Cascanueces es conocido por su libro y el ballet pero la película infantil nos trae otros valores que pasan desapercibidos.

AVISO: ¡Este artículo contiene spoilers de Barbie en el Cascanueces!

En octubre de 2001, las muñecas llegaron a la pantalla grande. El primer largometraje de Barbie se estrenó en formato VHS con el nombre de Barbie en el Cascanueces.

Muchos de los que han crecido con esta película y las que le siguieron están ahora en esa época en la que hay que preocuparse por la universidad o el trabajo. Y puede que uno se inquiete a la hora de elegir qué camino seguir, pero, con ver Barbie durante tu infancia viene un lema:

“Tú puedes ser lo que quieras ser.”

Barbie

 Lo que significa que nada te impide hacer lo que guste en la vida.

Así que, con este mensaje en mente, echemos un vistazo a la película que lo empezó todo…

Para aquellos que no la hayan visto o no la recuerden, esta película es un cuento dentro de otro cuento. Barbie y su hermana menor, Kelly, están practicando la Danza del Hada de Azúcar. Kelly no logra ejecutar los pasos del baile correctamente y teme fracasar cuando llegue la hora de subir al escenario. Barbie, para animarla, le cuenta la historia de Clara y su valentía a través de su papel en El Cascanueces.

Ahora es cuando comienza el Cascanueces, que mantiene la fidelidad al original en los momentos más imperativos, pero decide tomarse algunas libertades mágicas (como el Gigante de Roca o el castillo de cartón) en otros.

La protagonista, Clara, vive con su abuelo y su hermano. Durante una fiesta de Navidad, su tía llega con regalos, el de Clara es un Cascanueces. Esa misma noche, ella es testigo de cómo este último cobra vida y lucha contra unos soldados ratones. El Rey Ratón la encoge con magia cuando Clara trata de intervenir y el Cascanueces promete ayudarla para agradecerle por su amabilidad.

A continuación, vemos las aventuras de Clara, ahora del tamaño de una muñeca, el Cascanueces, que en realidad no está hecho de madera, y los aliados que reúnen, mientras los seguimos en su búsqueda de la Princesa de Azúcar, que dicen que es un ser mágico amable, valiente e inteligente y el único que puede ayudarlos a volver a ser ellos mismos.

A pesar de los intentos del Rey Ratón de impedir dicho plan y deshacerse del Cascanueces permanentemente, consiguen devolver el reino al Cascanueces, que en realidad es el Príncipe Eric, y se dan cuenta de que Clara siempre fue la Princesa de Azúcar. Es un final feliz para todos los involucrados, y Clara y Eric se reúnen en el otro mundo después de que ella es regresada a casa.

Barbie en el Cascanueces es, en esencia, una historia sobre la valentía. Como la primera película de Barbie, lleva la antorcha de enseñar una moraleja al final de la historia. Esta vez, es:

“Cuando eres amable, valiente e inteligente, todo es posible.”

Barbie en el Cascanueces

Desde el principio, Barbie nos ha mostrado cómo se puede ser inteligente y hermosa al mismo tiempo.

Y esos no son los únicos mensajes que podemos tomar. Porque, aunque su ritmo es un poco extraño (a veces es demasiado lento o demasiado rápido, con sus pausas incómodas y el uso de las hadas como solucionadoras de todo problema), todo se trabajó con tanto cuidado y tanta pasión que se puede entender las limitaciones del CGI de los años 2000 y aún así encontrarlo entretenido. Por lo tanto, lo primero que hagan al probar algo nuevo no tiene por qué ser tu obra maestra, ya que aun así será apreciado por los demás y marcará el camino para mejorar.

Además, a veces un solo método no es suficiente, y no pasa nada. Barbie en el Cascanueces utiliza la animación en 3D para que sus personajes parezcan hechos de plástico, junto con fondos en 2D para simular los cuadros pintados de los libros de cuentos infantiles. Tampoco tiene miedo de pedir ayuda, ya que utiliza producciones de ballet como referencia para coreografiar el mejor ballet animado posible.

Así que, a los que empezamos la universidad o un nuevo trabajo, a los que tememos que cada día sea un día más cerca de estas nuevas inquietantes situaciones, o a los que sentimos que no llegan lo suficientemente rápido, sepan que todo lo que se propongan lo van a conseguir. Aunque necesitemos ayuda. Aunque tengamos que volver a intentarlo. Aunque las probabilidades estén en nuestra contra. Seamos valientes e intentémoslo.

Esto es lo que nos enseñó la primera historia de Barbie, ¿y a ustedes?

¿Que opinas?

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